Atlético Tucumán sacó adelante un partido vibrante y consiguió un triunfo clave sobre Instituto en un cierre emocionante. Con un gol en el último suspiro, el equipo tucumano se impuso 3-2 en casa y sigue firme en la pelea en la Zona B del Torneo Apertura.
El encuentro arrancó con intensidad, con el Decano buscando imponer condiciones desde el inicio. La primera alegría llegó justo antes del descanso, cuando Mateo Coronel apareció en el área para definir con categoría y poner el 1-0 a los 45 minutos del primer tiempo. Apenas iniciado el complemento, Miguel Brizuela amplió la ventaja con un cabezazo que parecía encaminar el partido a favor del conjunto local.
Sin embargo, Instituto reaccionó y no tardó en meterse nuevamente en la pelea. A los 56 minutos, Alex Luna convirtió desde el punto de penal para achicar la diferencia y devolverle la esperanza a la visita. Con el envión anímico, el equipo cordobés siguió insistiendo y a los 81 minutos logró igualar el marcador con otro tanto de Luna, que silenció el estadio y dejó todo abierto para un desenlace electrizante.
Cuando parecía que todo terminaba en empate, Atlético Tucumán sacó su garra y encontró el gol decisivo en la última jugada del partido. Nicolás Lamendola apareció en el área y con una definición letal a los 90 minutos desató la locura en el Monumental José Fierro.
Un triunfo que vale oro para el Decano, que sigue consolidándose en la parte alta del grupo. Instituto, pese a la remontada parcial, se va con las manos vacías y deberá recuperarse rápido para seguir en la pelea.
Atlético Tucumán festeja con su gente, y esta victoria puede ser el impulso necesario para encarar la recta final del torneo con la confianza en alza.
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