Boca Juniors tuvo una noche para el olvido en Rosario al caer 2-0 frente a Newell's en un partido que expuso todas sus falencias. La derrota no solo le costó los tres puntos, sino también la punta de la Zona A del Torneo Apertura.
El encuentro comenzó con un gol tempranero que cambió los planes de Boca. Apenas al minuto 5, Luciano Herrera aprovechó una mala cobertura defensiva y puso en ventaja al conjunto rojinegro. Boca, por su parte, parecía perdido desde el inicio, incapaz de generar juego y con una desconexión evidente entre líneas.
El cierre del primer tiempo solo empeoró las cosas para el Xeneize. En tiempo de descuento (45+3), un balón parado encontró la cabeza de Luciano Lollo, quien sentenció el segundo tanto de Newell's. Dos desatenciones claras que dejaron a Boca al borde del abismo antes del descanso.
La segunda parte no trajo el cambio que se esperaba. Cavani tuvo la oportunidad de descontar desde el punto penal, pero su remate fue atajado, siendo una de las pocas chances claras del equipo. Además, la lesión de Herrera obligó a un cambio forzado, dejando a Gago sin margen de maniobra para ajustar el planteo.
El técnico de Boca intentó con las variantes, pero ninguna funcionó. Los cambios no lograron modificar la dinámica del partido, y la falta de ideas en ataque quedó en evidencia. Gago, que había sido criticado en semanas previas por algunas decisiones tácticas, sumó otra jornada en la que sus movimientos no dieron el resultado esperado.
Newell's, sólido y práctico, capitalizó los errores de su rival y se llevó una victoria que lo deja en carrera. Boca, en cambio, tendrá que replantearse mucho antes de su próximo compromiso. Hoy no hubo juego, no hubo reacción y, sobre todo, no hubo respuestas.
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